MEDICAMENTOS
Se los conoce como "estabilizadores del
estado de
ánimo" (anticíclicos o antirecurrenciales) son usados para mejorar los
síntomas durante los episodios agudos maníacos, hipomaníacos, y mixtos.
Pueden a veces también reducir síntomas de depresión. Son el apoyo del
tratamiento preventivo a largo plazo tanto para la manía como para la
depresión. Los más utilizados son los siguientes:
-
Litio (Plenur, Eskalith, Lithobid, Lithonate, Ceglution, Lithiun)
-
Divalproato de Sodio
(Valcote,
Depakote, Depamide)
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Carbamazepina
(Tegretol, Carbatrol, Epital, Atretol)
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Lamotrigina
(Lamictal)
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Gabapentin
(Neurontin)
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Topiramato
(Topamax)
-
Olanzapina
(Zyprexa)
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Oxacarbamazepina
(Trileptal)
En investigación se encuentran:
ABS-103:
Actualmente, este fármaco se está sometiendo a estudios preclínicos
para evaluar su potencial como tratamiento para epilepsia, migrañas y
manía. La evidencia sugiere que puede ser tan eficaz como el
Divalproato, pero sin ocasionar tantos efectos secundarios. De hecho,
podría ser que ABS-103 fuera seguro para las mujeres en edad de
concebir.
Los bloqueadores de la sustancia P son otro tipo de
medicamentos recién creados que también podrían ser eficaces para
ayudar a regular el humor. Esta clase de fármacos toma su nombre de la
forma en que funcionan: a diferencia de los SSRI (inhibidores
selectivos de la recaptación de serotonina), estos medicamentos
bloquean una substancia química cerebral llamada sustancia P. Esta
sustancia se descubrió en 1931 y los medicamentos diseñados para
funcionar contra dicha sustancia a menudo se han usado en forma
experimental, pero nunca con éxito, en intentos de tratar
padecimientos como neuralgia crónica, migrañas, ansiedad y asma. En un
estudio reciente de un bloqueador de sustancia P denominado MK-869
se determinó que el fármaco funciona tan eficazmente como el SSRI
Paxil y ocasiona menos de los efectos secundarios que afectan la
función sexual.
Afortunadamente, cada uno de los
estabilizadores del estado de ánimo posee diferentes acciones químicas en el
cuerpo. Si con uno no consigue una respuesta terapéutica satisfactoria, o usted tiene efectos secundarios
persistentes, su médico puede sugerirle otro, o dos medicamentos
combinados en dosis que usted puede manejar. Para los
estabilizadores del estado de ánimo se hacen pruebas en sangre para determinar
la dosis correcta y para monitorear la seguridad del efecto terapéutico
deseado.
Seleccionando un estabilizador de ánimo durante
un episodio maníaco agudo
Las drogas de primera línea para el
tratamiento de una fase de un episodio maníaco agudo son el litio y el
divalproato de sodio. Al elegir entre ellos, su médico tendrá en cuenta si ya estas
medicinas han resultado eficaces para usted en el pasado o si hay efectos
secundarios particulares que podrían afectar su preferencia. Cuando todo
ya es igualmente considerado, la decisión inicial puede ser que dependa
del subtipo de trastorno bipolar que usted padezca. Los expertos
recomiendan carbonato de
litio para pacientes con ánimos eufóricos (extremadamente alegres,
"manía eufórica") y divalproato de sodio para pacientes con manifestaciones mixtas (episodios maníacos
con un ánimo muy infelíz o irritable, "manía disfórica") o para pacientes que tienen ciclos
de cambios rápidos (4 o más episodios por año, "cicladores rápidos").
Acerca de la hospitalización
El tratamiento en el hospital es
necesario a veces pero es generalmente breve (12 semanas). La
hospitalización puede ser esencial para evitar el comportamiento
destructivo propio, impulsivo, o agresivo que la persona va a lamentar
después. Los pacientes maníacos frecuentemente carecen de conciencia que
están enfermos y requieren hospitalización. La investigación ha mostrado
que después de la recuperación, la mayoría de pacientes maníacos están
agradecidos por la ayuda que recibieron, aunque fuera dada contra su
voluntad en el momento.
Durante la depresión, la hospitalización
puede ser necesaria si una persona presenta alta ideación suicida o haya
cometido algún intento de suicidio. La
hospitalización está también indicada para personas que tienen
complicaciones médicas que hacen más difícil monitorear los medicamentos
y para la gente que no puede dejar de usar drogas de adicción o alcohol. Recuerde,
el temprano reconocimiento y tratamiento de episodios maníacos y
depresivos pueden disminuir la necesidad de hospitalización.
El medicamento para la prevención de toda una vida.
El exitoso manejo del trastorno bipolar
requiere mucho de los pacientes y las familias. Habrán ciertamente
muchas veces cuando usted estará tentado urgentemente de detener su
medicamento por que 1) usted se siente bien y cree "estar curado/a", 2) usted extraña la excitación/euforia, o 3) usted se siente molesto
por los efectos secundarios. Si
usted suspende su medicación, probablemente no tendrá un episodio
agudo inmediatamente durante los días o semanas que siguen, pero con el
tiempo seguramente tendrá una recaída.
A veces el diagnóstico es incierto
después de un sólo episodio y es posible reducir lentamente el
medicamento después de casi un año. Sin embargo, si usted ha tenido
solamente un episodio de manía pero tiene una historia familiar muy
fuerte (sugiriendo que puede haber heredado este trastorno), o si el
episodio fue tan severo que casi le arruinó su vida, usted debería
considerar seriamente tomar medicación durante varios años, si no de
por vida. Si ha tenido dos o más episodios maníacos o depresivos,
los expertos recomiendan fuertemente que tome medicamento de prevención
indefinidamente.
¿Cuán frecuente funciona el medicamento de
prevención?
Los estabilizadores del estado de ánimo son el núcleo de
la prevención, es decir, para evitar recaídas. Cerca de una de cada tres personas
con trastorno bipolar estará completamente libre de síntomas
tomando medicamentos estabilizadores del estado de ánimo de por vida. La mayoría
de la gente experimenta una gran reducción en la frecuencia de los
episodios o en la severidad de los mismos. No se desaliente si usted
ocasionalmente siente que pudiera estar en camino a un episodio maníaco
o depresivo. Siempre reporte inmediatamente cambios a su médico, debido
a que ajustes en su medicina cuando tiene los primero síntomas pueden
generalmente restaurarle el ánimo normal. A veces basta con un
ligero aumento en la dosis del estabilizador del estado de ánimo, u
otras medicinas pueden necesitar ser añadidas. Los ajustes del
medicamento prescripto son generalmente una parte rutinaria del tratamiento (lo
mismo que la dosis de insulina es cambiada de vez en cuando en la
diabetes). Nunca tema informar los cambios de síntomas ya que generalmente no
requieren ningún cambio dramático en el tratamiento y su médico
estará ansioso por ayudar.
Referencias Bibliográficas
- Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, 4° edition
(DSM-IV TR), American Psychiatric Association. American Psychiatric Press, 2000.
- Kaplan and Sadock's Synopsis of Psychiatry, 10° edition. Lippincott
Williams & Wilkins Press, 2007.
- The American Psychiatric Publishing Textbook Of Psychopharmacology, by Alan F. Schatzberg and Charles B. Nemeroff, 4° edition, 2009.
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